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miércoles, 3 de julio de 2013

Monsieur Hollande, ¿si tenemos éxito con Apple, después prohibimos la ley de la gravedad?



Vacuus Finium se extiende a Twitter, para comentarios espontáneos durante el día, me pueden seguir en @vacuusfinium.

Como habrán notado los amables lectores, he estado actualizando el blog con una frecuencia menor a la acostumbrada, y después de mucho reflexionar he llegado a la conclusión de que el mundillo tecnológico está viviendo una depresión posterior a la revelación del extensivo y despiadado espionaje cibernético, realizado en una escala global por el gobierno de los Estados Unidos.  Hay poco que comentar, más allá de asuntos triviales

Muchas de las grandes empresas tecnológicas, como Facebook o Google, simplemente han perdido cualquier aire de idealismo, ¿alguien se acuerda del "don't be evil"? Algunos, Microsoft por ejemplo, simplemente nos han confirmado nuestras peores sospechas. Entre las múltiples revelaciones que nos han bombardeado en las últimas semanas, ha pasado ligeramente desapercibido el hecho de que Microsoft tiene la costumbre de informar primero a la NSA (National Security Agency) sobre las áreas vulnerables de sus productos, y darles una ventaja para que las exploten antes de proporcionar una solución al mercado. Stevie B, hay que reconocer que me sorprendieron tus muchachos, sabía que tenían muy baja calidad moral, pero no la suponía al nivel del subsuelo.

Si tuviera que responder mi opinión sobre la principal tendencia en el mundo tecnológico actual, mi respuesta es sencilla: el desencanto. Algunas evidencias: 

  • Tim Berners Lee, creador del World Wide Web, habla sobre el intento de compañías y gobiernos por controlar el Internet y alejarse de sus principios fundadores.
  • El escritor sobre temas económicos, Robert Samuelson, simplemente dice que "estaríamos mejor sin el Internet".
  • Sue Gardner, directora ejecutiva de Wikipedia, no se anda con rodeos, ya que en su opinión, estamos perdiendo la batalla por un Internet libre y abierto.

Si al desencanto de los expertos, unimos la verborrea populista en contra de las compañías tecnológicas, definitivamente no son los mejores tiempos para hablar de la industria. Aunque la frecuencia de publicación en el blog ha padecido, mi ritmo de trabajo y lectura ha continuado igual, el ambiente de pesimismo que percibo, me congela cuando estoy enfrente del teclado.

Por esta razón, le agradezco mucho al gobierno francés su furiosa cruzada en contra de la compañía Apple, por fin algo de que reír. En la última semana diferentes agencias del gobierno de François Hollande, han lanzado dos investigaciones en contra del comportamiento comercial de Apple. Aunque es fácil descartarlas como insensateces de una burocracia híperactiva, en el fondo indican que hay una vieja economía lanzando golpes de desesperación, tratando de regresar a una hipotética "era dorada". Algunos hechos:

  • La primera investigación, gira en torno a las políticas comerciales de Apple en torno a sus puntos de venta y su relación con otros distribuidores. Simplemente hay un detallista en electrónica de consumo francés aduce su bancarrota a  la ventaja ilegítima que tiene las Apple Store al recibir primero los nuevos productos. Ya metidos en investigaciones absurdas, las profundas pesquisas de los reguladores franceses se van a extender a la tienda en línea. El asunto va en serio: durante el fin de semana las oficinas de Apple en París fueron allanadas por las autoridades competentes.
  • La segunda investigación, todavía mas absurda, va en contra de las políticas de Apple en torno a las políticas de su tienda de aplicaciones ( App Store). En opinión del ente regulador francés, Apple se aprovecha del efecto de "lock in" para impedir que los cándidos e indefensos consumidores puedan cambiar de aplicaciones sin grandes costos.
  • La furia de las autoridades francesas, va más allá, e incluso quieren revisar las políticas de precios del App Store, ya que actualmente impiden que un desarrollador obtenga un ingreso suficiente para vivir. Difícil de creer pero en eso utilizan su tiempo, pero bueno, no hay que dudar de sus intenciones inquisidoras: Amazon y Google también van a ser investigados.

Algunos comentarios y reflexiones:
  • En el blog muchas veces he platicado sobre el efecto de "lock in" y la manera en que es un efecto implícito al surgimiento de los mercados tecnológicos. Para ponerlo en lenguaje directo: "lock in" es el costo, tangible o intangible, que se tiene al cambiar la selección de tecnología actual. 
  • En el momento que un consumidor, sin importar su racionalidad, elige una tecnología para resolver un problema de su vida diaria, comienza a realizar una "inversión" de su tiempo y esfuerzo en utilizarla y en muchos casos empieza a crear "activos" que le son útiles. Es evidente que con el paso del tiempo, resulta muy costoso, hacer un cambio tecnológico que implique la perdida de estos activos o una nueva inversión en tiempo y esfuerzo.
  • Un par de ejemplos:

  1. Las grandes empresas que desarrollaron sus primeros sistemas en grandes sistemas de cómputo mainframe y tienen ahí alojadas sus bases de datos, tienen poderosas razones para seguir con la tecnología seleccionada. Simplemente la inversión en el cambio de plataforma, excede en varios órdenes de magnitud el beneficio de comprar equipos de cómputo de menor precio.
  2. En un ejemplo más doméstico, Mrs. Finium, tan o más aguerrida que sus hijos, siempre ha sido muy reacia a cambiar de marca de teléfono móvil, ya que la simple idea de aprender una nueva interfaz de usuario es poco atractiva. La posibilidad de tener que hacer una migración manual de la agenda de contactos, termina cualquier conversación. No hay iPhone que valga.

  • ¿En los ejemplos anteriores los consumidores actuaron con plena racionalidad o fueron víctimas de un oscuro e insidioso mecanismo creado por los vendedores de la tecnología? Me parece evidente la respuesta.
  • El mecanismo de "lock in" es inseparable de la creación de mercados tecnológicos, aunque no les guste a los franceses. Un mercado tecnológico nace cuando al menos dos tecnologías diferentes compiten entre si para resolver una necesidad de los consumidores.
  • Por razones, totalmente impredecibles, llamadas "externalidades" los consumidores empiezan a favorecer a una tecnología sobre las otras. En algún momento, esta tecnología empieza a ganar una "masa crítica" de usuarios, que a su vez atrae a nuevos consumidores. En algún momento, se crea un efecto de retroalimentación positiva y al menos durante un tiempo esta nueva tecnología va a tener un "lock in" sobre sus consumidores.
  • El "lock in" tiene el efecto de crear una economía del estilo "el ganador se lleva todo", y prácticamente deja a los competidores en ruinas. En el mejor caso, algunos mercados tecnológicos permiten la existencia de un  "segundo lugar", pero usualmente las diferencias en ingresos son abismales. Por cierto, no siempre gana la mejor tecnología.
  • En la historia abundan ejemplos:
  1. En algún momento, durante el nacimiento de la industria automotriz, los motores de combustión interna compitieron en contra de motores eléctricos. Sobra decir quién gano, al menos los primeros 150 años.
  2. Durante la creación de la industria de distribución de energía eléctrica, compitieron los sistemas de corriente alterna en contra de los sistemas de corriente directa.
  3. En un ejemplo muy socorrido, cuando nacieron los equipos de grabación y reproducción de video en casa, había dos tecnologías diferentes: Betamax y VHS. De la primera no quedó más que un pálido recuerdo.
  • Por lo tanto el "lock in" es necesario e indispensable para el surgimiento de mercados tecnológicos rentables y atractivos.  Tal vez a alguien en el Elíseo le resulte una idea extraña, pero la innovación tecnológica se hace para ganar dinero. Y ya metidos en confesiones, mucho dinero es todavía mejor.
  • Por cierto, el consumidor no necesita burócratas que lo defiendan, ya que normalmente tiene un olfato muy desarrollado para captar intentos no naturales de "lock in". El mejor ejemplo es la memoria en formato propietario utilizado por las cámaras Sony. Alguna genio en Tokyo, pensó que nadie se iba a dar cuenta que al adquirir una cámara con ese sistema se creaba una dependencia absurda hacia un tipo de memorias. La participación de mercado de las cámaras Sony es ridícula  y es uno de los tantos fracasos que los tienen al borde de la desesperación.
  • Pero si bien, pelearse contra el "lock in" es igual de absurdo que pelearse contra la marea de los océanos, todavía es más absurdo querer controlar la dinámica de selección de los mercados tecnológicos. Simplemente los desarrolladores de aplicaciones compiten bajo un implacable mecanismo de selección (ver viñetas anteriores) y no hay manera de evitar el mecanismo del "ganador toma todo". 
  • ¿Cuál es la propuesta del gobierno francés? ¿Limitar el número de personas que pueden comprar una aplicación? ¿Fijar un "precio mínimo" de venta para una aplicación? ¿Crear un impuesto especial para que los grandes desarrolladores subsidien a los desarrolladores mediocres? No tiene ni pies ni cabeza su investigación.
  • De igual manera, ¿se puede regular la relación de un fabricante con sus distribuidores? Hasta donde se, la relación contractual que se hace con un fabricante es voluntaria y si algún vendedor minorista considera que no recibe un trato justo, es libre de llevarse su dinero a otra parte. Evidentemente cuando hablamos de productos tan deseados como los producidos por Apple, esta decisión no puede ser tan fácil, pero simplemente son las reglas del juego.
  • ¿No se debe buscar al responsable de la bancarrota de cualquier empresa en sus oficinas directivas? 
  • Una vez más, ¿cuál es la propuesta del gobierno francés? ¿Auditar la cadena de distribución de Apple para garantizar que todos los participantes reciban equipo al mismo tiempo? O en su afán de defender al "pequeño comerciante" obligar mediante una ley o un impuesto a que el fabricante sea el último en recibir su producto? Por más vueltas que le doy, no entiendo en que están pensando y que pretenden con su investigación.

Me parece que las acciones de las autoridades  francesas van a ser totalmente inútiles, y más bien parece la persecución de molinos de viento. Tal vez es una forma de mostrar el desencanto, ante el mundo tecnológico.

Postdata I Ya no los hacen como Papa Hemingway

Aunque hay varios asuntos que comentar, quiero compartir este texto, de una carta que envió el escritor Ernest Hemingway a su traductor en Rusia, en el que le reprocha su poco gusto por las bebidas alcohólicas (raro en un ciudadano ruso, pero bueno). Vale la pena leer todo el texto, pero extraigo dos párrafos que me gustaron:

"He bebido desde los quince años y pocas cosas me han proporcionado mayor placer. Cuando trabajas todo el día con tu cabeza y sabes que al día siguiente tienes que trabajar otra vez, ¿ qué más que el whisky puede cambiar tus ideas y llevarlas a un plano diferente".

"La vida moderna, también, es a menudo una opresión mecánica y el licor es el único alivio mecánico. Déjame saber si mis libros ganan algo de dinero e iré a Moscú y encontraremos a alguien adecuado que beba y se tome mis regalías para terminar la opresión mecánica".

Postdata II Los sonidos de Vacuus Finium

La recomendación de hoy, es la grabación de 2013 "Without a Net" del grupo del saxofonista Wayne Shorter.  Presente en la escena del jazz desde finales de la década de los cincuenta, en este momento Shorter es uno de nuestros últimos enlaces con el pasado. Shorter se ganó su fama como instrumentista tocando primero en los Jazz Messengers de Art Blakey, y después con el afamado "segundo quinteto" del trompetista Miles Davis. En esta última agrupación, Shorter ganó su fama como compositor.

Después de abandonar el grupo de Davis, Wayne Shorter mantuvo "dos carreras" en la década de los años setenta: como solista y como miembro fundador del grupo Weather Report ( ya he recomendado grabaciones de ellos). La recomendación de hoy, es una muestra total de lo que representa la evolución del jazz en este momento. Aquí no hay modas ni guiños comerciales, simplemente se trata de una música total, que refleja su tiempo y guarda una relación con lo mejor del pasado. No reniega de uno, no se pierde en el otro.

La revista especializada Down Beat, designó en su edición de julio a Shorter como el músico y saxofonista del año. Su grupo también es elegido como la mejor agrupación de 2013 y adicionalmente, "Without a net" es la mejor grabación. Disponible en iTunes

Para aquellos atraídos por la música de Shorter, el mejor punto de entrada es la colección "The Classic Blue Note Recordings", también disponible en iTunes y a un precio atractivo.

En la creación de la nota de hoy apliqué mi propia medicina: un par de shots de Lagavulin 16 single malt, al tiempo que escucho la grabación de Shorter. En realidad, toma tanto tiempo escribir una nota que también tengo en el reproductor de discos compactos, la grabación "Ten Freedom Summers" del trompetista Wadada Leo Smith, designado por Down Beat como la segunda mejor grabación de 2013.




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